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Los chinos vendedores de collares de perlas, de Juan M. Mata
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Citación
“Los chinos vendedores de collares de perlas, de Juan M. Mata,” Archivo China España, 1800-1950, consulta 16 de noviembre de 2024, http://ace.uoc.edu/items/show/635.
Título
Los chinos vendedores de collares de perlas, de Juan M. Mata
Fecha
1925-11-20
Descripción
En este fascinante documento, el periodista Juan Mata trata de dar respuesta a la aparición de varios ciudadanos chinos, "hombres misteriosos, de rostros impenetrables y sonrientes", en las calles de Madrid donde venden collares de perlas.
Tras no conseguir comunicarse con un vendedor, el periodista busca, sin éxito, algún español que hable chino o un chino que hable español (esto último, en una venta de la calle Echegaray donde, al parecer, residían los vendedores).
El resultado de sus pesquisa es que los siete chinos residentes en Madrid pertenecen a un grupo de veintiséis cantoneses que se habían repartido por distintas regiones tras llegar vía India, Egipto, Alemania y Francia. Asimismo informa que las perlas son alemanas y francesas, en su mayoría distribuidas por empresas locales.
El periodista acaba notando "la influencia del mundo espiritual, del factor psíquico, de la sugestión de lo desconocido", que había convertido esta bisutería en un codiciado objeto en las calles madrileñas y, en un interesante reverso, se imagina cómo en Guangdong se estarán imaginando un exótico y lejano "país de maravilla [donde] existe una riqueza insospechada, inagotable, una mina fabulosa. Se llama Madrid".
El artículo incluye fotografías de Virgilio Muro, aunque la digitalización impide apreciarlas todas.
Tras no conseguir comunicarse con un vendedor, el periodista busca, sin éxito, algún español que hable chino o un chino que hable español (esto último, en una venta de la calle Echegaray donde, al parecer, residían los vendedores).
El resultado de sus pesquisa es que los siete chinos residentes en Madrid pertenecen a un grupo de veintiséis cantoneses que se habían repartido por distintas regiones tras llegar vía India, Egipto, Alemania y Francia. Asimismo informa que las perlas son alemanas y francesas, en su mayoría distribuidas por empresas locales.
El periodista acaba notando "la influencia del mundo espiritual, del factor psíquico, de la sugestión de lo desconocido", que había convertido esta bisutería en un codiciado objeto en las calles madrileñas y, en un interesante reverso, se imagina cómo en Guangdong se estarán imaginando un exótico y lejano "país de maravilla [donde] existe una riqueza insospechada, inagotable, una mina fabulosa. Se llama Madrid".
El artículo incluye fotografías de Virgilio Muro, aunque la digitalización impide apreciarlas todas.
Fuente
MATA, Juan M. "Los chinos vendedores de collares de perlas", Blanco y Negro, 20 de noviembre de 1925, pp. 32-34.
Derechos
Hemeroteca ABC.