Franciscanos españoles

Fotografía de los franciscanos Antonio Rey y Fernando Etayo

El sacerdote chino Antonio Rey y el P. Fernando Etayo en Shaanxi

Fotografía de franciscanos en China

En el centro, el P. Francesc Bernat

Autor: Xavier Ortells-Nicolau

Las misiones franciscanas en China se remontan a Juan de Montecorvino (1247- 1348), quien en el siglo XIII, y con el apoyo de la regente dinastía mongola de los Yuan, construyó la primera iglesia católica en Beijing.

La presencia franciscana en el centro de China se data en 1640. En 1840 se instituyó un vicariato apostólico propio en el norte de Shaanxi. En el siglo XX, la presencia franciscana estuvo marcada por el asesinato de númerosos conversos y misioneros durante la crisis Bóxer. Tan solo en Taiyuan (Shanxi), murieron 4.000 católicos, incluyendo los obispos Gregorio Grassi y Francisco Fogolla, franciscanos italianos. Pero en las décadas siguientes el número de misioneros no paró de crecer: en 1924, ya había 248 (El Eco Franciscano, 01/02/1924), en su mayoría italianos, pero también franceses, belgas y españoles.

Los misioneros provenientes de España (mayormente cántabros, vascos y catalanes) se concentraron en la zona al norte de Shaanxi, en el vicariato apostólico de "Shen-si septentrional" con sede en Yan'an. Datos del 15 de agosto de 1923 dan los siguientes números: 70 cristiandades, 36 residencias, 172 Terciarios, 3.009 católicos, 3.369 catecúmenos. Se acreditan 117 bautismos de niños y 280 de adultos, 2.864 confesiones, 20.930 comuniones y 41 matrimonios (El Eco Franciscano15/02/1924).

Publicaciones mensuales como Apostolado seráfico en ChinaEco Franciscano publicaban correspondencia, noticias y fotografías enviadas por los misioneros desde China.

Otra fuente importante es la semblanza biográfica de Francesc Bernat (Episodis de la vida misionera. Vic: editorial Seráfica, 1927), publicada por Francesc Pons, asimismo misionero en China, que ilustra los itinerarios de los franciscanos españoles así como, en ocasiones, como en el caso de Bernat, el funesto destino que podía aguardarles en la convulsa China de la época.

El 7 de noviembre de 1908, Francesc Bernat zarpó de Barcelona junto a otros misioneros en el Claudio López, uno de los buques de la Compañíaa Trasatlántica que realizaba la conexión con Manila. En Filipinas tomaron un vapor japonés hasta Hong Kong, donde se hospedaron con los Dominicos y conocieron al obispo Salvador Massot. La Navidad de 1908 llegaron a Shanghai y dos días después se embarcaron hacia Hankou, donde toman un tren hasta Changsha y de ahí, tras nueve días en carro, llegaron a Xi'an, el 21 de enero de 1909, culminando un viaje de 82 días.

Fotografía de la residencia franciscana de Tang-kia-pin, Shaanxi Niñas acogidas por la Santa Infancia de Yilin

En Tung Yuan Fang, los franciscanos tenían una iglesia, un orfanato a cargo de las Misioneras de María, un seminario y una residencia. Allí permanecerá Bernat durante tres meses aprendiendo chino con el misionero vasco Ángel Zuazubiscar, tras lo que se le encargará la dirección del orfanato.

En octubre de 1910, Bernat y otros tres misioneros emprendieron una tarea de gran dificultad: viajar hacia el norte de la provincia a fin de asentar nuevas misiones en la región de Yan'an. Bernat se establecerá en pequeñas aldeas a orillas del Huang He, como Tang-Kia-pin (Dangjiacun), si bien también desarrollará su actividad más al norte, en Yulin, en el borde con Mongolia Interior, donde impulsó la implantación de la Santa Infancia. En su memoria, el obispo Ibáñez, con la mediación del Ministro de Francia en Beijing, destinó la indemnización del gobierno chino por la muerte de Bernat, que fue asesinado junto a su criado por unos bandoleros en 1913, a instituir el primer orfanato de Yulin.

 

 

 

 

Citación recomendada

Ortells-Nicolau, Xavier. “Itinerario: las misiones de China: franciscanos españoles”, Archivo China-España, 1800-1950, [fecha de consulta], http://ace.uoc.edu/exhibits/show/misiones-china/franciscanos-espanoles