Autor: Xavier Ortells-Nicolau
En 1927, el cónsul español en Shanghai acreditó en una carta 605 españoles residentes en China. “De estos 255 figura que nacieron en España y 350 fuera de ella. Estos últimos son en sumayoría mestizos salvo algún español peninsular que accidentalmente naciera fuera del Reino”. Un libro de registro del consulado de principio de los años treinta arroja más de 600 entradas, con nombres que revelan orígenes diversos.
Cuando Luis Valera Delavat llega a Shanghai en agosto de 1900, deja constancia que "Nosotros también tenemos colonia en Shanghai. Compónese ésta, en primer lugar, de los Reverendos Padres Agustinos, con su procurador a la cabeza, españoles todos de la Península; y luego de 200 a 300 filipinos, muy pobres en su mayoría, sin que ninguno sea rico e influyente."
Los principales miembros de la comunidad española de Shanghai en 1927
Unos años más adelante, una reducida élite, conformada por empresarios, diplomáticos, religiosos, pelotaris y profesionales, frecuentemente emparentados entre sí, trataron de establecer una "comunidad" o "colonia" española en Shanghai. Entre ellos encontramos familias con vínculos con la Manila española (como los Mencarini, Lafuente, Ramos, Martí) o a familias judías sefardíes de origen turco (como los Cohen, los Skenazy).
El restaurante Sevilla, abierto por pelotaris y lugar de encuentro de la comunidad española
Sin concesión ni territorio pero con derecho de extraterritorialidad, el estatus colonial de España en Shanghai es ambiguo. Su presencia se difumina a menudo frente al gran número de ciudadanos británicos, franceses, japoneses y rusos. A diferencia de las grandes potencias, que gozan de clubes, grandes consulados, periódicos, etc., los españoles no tienen un hito ni un espacio de encuentro. En 1915 hubo un intento de constituir un Casino Español pero fue una corta aventura…de un año. La sombrerería de Gerónimo Candel "La España" hizo las funciones de centro español, o al menos así lo retrató el periodista José María Romero Salas cuando visitó Shanghai en 1921. Cuando en 1932 se recibió material promocional de la bailarina y guitarrista Asunción Granados, que planeaba una tourné asiática, el cónsul lo remitió al restaurante “Sevilla”, que parece ejercer en ese momento funciones de local social o punto de encuentro de los españoles en Shanghai.
Stand español diseñado por Modesto Martí
Casa de veraneo de Antonio Ramos
Las familias principales estrechan sus lazos a través de enlaces matrimoniales, como el de Dolores Mencarini (hija de Juan Mencarini) con Antonio Martí, hijo de Modesto Martí, en 1909, o el de Alfredo, otro hijo de Mencarini, quien desposó una sobrina del empresario Antonio Ramos, Almudena Ruiz.
También las fiestas patrias y otros eventos se utilizaron para exhibir identidad. Los Martí-Mencarini precisamente se encargaron del stand español en la feria benéfica que tuvo lugar en mayo de 1907 para recaudar fondos para la gran hambruna que asoló la provincia de Jiangsu. En el stand, diseñado por Modesto Martí a imitación de "un rincón de Sevilla", se ofrecieron cigarrillos y abanicos.
De hecho, la arquitectura, en la práctica de Abelardo Lafuente y el mecenazgo de empresarios españoles como Antonio Ramos y Alberto Cohen, fue lo que más se acercó a constituir un legado físico de la presencia e identidad española en Shanghai.
Referencias
- Archivo General de la Administración, correspondencia consular, Shanghai.
- North China Herald
- José Valera. Sombras chinescas: recuerdos de un viaje al Celeste Imperio. Nausícaä, 2004.
Citación recomendada
Ortells-Nicolau, Xavier. “Itinerario: Españoles en Shanghai: la comunidad española”, Archivo China-España, 1800-1950, [fecha de consulta], http://ace.uoc.edu/exhibits/show/espanoles-en-china/comunidad-espanola-shanghai